La Inmensidad del Atlántico

La Inmensidad del Atlántico
por Er Ñero José M. Aguilera
12-13 de Junio de 2003

Hace unos tres días, luego se sobreponernos a las vicisitudes de la última borrasca tuvimos el inicio de soleados buenos días, quizás los últimos dos, y bueno… como quien dice “bueno”… es decir, todo un día… solo el de ayer. Siempre hay un buen pensamiento acerca de sí vamos por fin a disfrutar de las leyes de las probabilidades, que decían, de acuerdo con las estadísticas, que la travesía se debería llevar a cabo con un máximo de 1 borrasca. …. Y llevamos 3, de 2 días cada una …. En 12 días de travesía.. Como decía Forrest Gump, no tengo nada que agregar al respecto.

Pero lo significativo de esta coyuntura, es el estado de ánimo y los pensamientos que le vienen a uno con cada circunstancia. No habíamos visto sol desde hacía días, cada borrasca había puesto a prueba nuestra paciencia, temple y fe, y una tras otra nos han hecho vivir la realidad de esta aventura, sin dudas. Sentados en la popa del velero, con la vista al mar, y habiendo disfrutado algunas horas de buen tiempo, casi nos pusimos de acuerdo en que prácticamente ya estábamos allí, en nuestro destino. Nunca habíamos nunca realizado una travesía tan larga… ni atravesado tantas borrascas, ni puesto a prueba nuestra integridad de tan brusca manera… al menos en estos menesteres, de repente en este ambiente de casi hilaridad, sentía la misión cumplida…. Es decir, lo que falta es nada, unos días y ya. No me pongo a considerar los días, no tenemos limitaciones estructurales ni logísticas aparentes, pero en cierta forma la distancia recorrida, en días, borrascas y miedo.. o temor, nos hacen reflexionar. Disfrutamos de esos momentos y pensamientos hasta que poco a poco la conversación, luego de varias horas de divagaciones nos lleva a considerar…¿Realmente donde estamos? Busco la carta marina, saco cuentas, analizo las velocidades verdaderas sobre tierra.. y aterrizo, en aquel momento dramático que no puedo describir. Entonces entiendo que la aventura sigue en proceso, que las millas pendientes son casi mas que las recorridas, que debemos evaluar y recapitular cada etapa, cada sistema, cada elemento de logística, y que aun no es tiempo de aliviarse, ni de alegrarse. Que hay que disfrutar ese día, o parte de él, soleado y bello que Dios nos ha brindado, que la naturaleza, con su generosidad y esplendor nos muestra con plenitud, pero al mismo tiempo hay que renovar fuerzas, espirituales y materiales, y estructurar nuestra existencia en base a esa realidad que difícilmente podríamos cambiar. Es que estamos pasados el Punto de No Retorno. Es decir, estamos un poco mas cerca de las Isla Azores que de la costas de Terranova o de Los Estados Unidos o Canadá. No solo en millas, sino en tiempo… cronológico y atmosférico. Los vientos predominantes, hacia el Norte vienen desde el Oeste y Noroeste, así que cualquier pensamiento de regreso nos llevaría a muchas vicisitudes e interminables maniobras de navegación a vela, por lo que… estamos mas comprometidos que ayer… y que hace una semana.

Y así nuestro ánimo cambia. Cada tripulante con su carga de emociones, cada quien con su morral a cuestas… de emociones, expectativas, problemas.

Algunas circunstancias nos hacen reaccionar… otras nos hacen reír. “Se terminó el Aceite de Oliva !!!!!!!!!!!!!” me informa el capitán con cara de gran seriedad, y con complejo de culpa, comunicando un asunto grave… que lo es efectivamente, porque es que no hay… ningún aceite de cocinar..!!!. y ya me lo había informado un experto en asuntos humanos… el Dr. Álvaro Requena, que hay que comer caliente, todos los días… sin parar, para poder fomentar el sentido de pertenencia y acondicionar el cuerpo y la mente a las circunstancias tan especiales que se viven en aventuras como esta. Así que la mente comienza a reaccionar… bueno hay tocineta..no mucha.. pero sirve, además, necesitamos dieta, porque el capitán, además es Chef y Jefe de Logística y … bueno todo, y se ha tomado en serio lo de la buena comida caliente, y como resultado, hemos comido cocina Gourmet…. con mayúsculas, casi todo el viaje, y caliente al menos 2 veces al día. Casi preferiría uno que el viaje no terminara. Pero como prepararemos esos deliciosos platos típicos Gallegos sin aceite de oliva ?? no lo sé…. Veremos.

Cuando esta realidad, de que estamos aquí… casi para quedarnos… nos toma por asalto, cambia nuestro humor, y buscamos nuevos anclajes que nos permitan disfrutar el resto de la estadía. Como la vida, que cuando nos graduamos de bachilleres, pensamos que ya…listo, pero unos meses después estábamos en la peladera del primer semestre universitario. O cuando nos casamos…. sentíamos la liberación plena …. resueltos, por fin… para luego comenzar en el proceso de manejar la relación con la cuaima que nos tocó y sobrevivir a la dominancia y cambios que la otra parte aspira…. hasta tener los hijos, preocuparnos por ellos, educarlos, y… luego los nietos (el mío vale por varios). Interminable.

Para consolidar nuestro espíritu, hacemos inventarios, y encontramos que, aparte del aceite de oliva… que falta únicamente por culpa del capitán, ya que este guatanero compró suficiente como para dar la vuelta al mundo, únicamente para recibir un regaño porque era demasiado peso para el velero, todo lo demás esta muy bien, aparte de pequeños fallos mecánicos que los ingenieros de abordo van componiendo. Sin embargo tomamos ciertas medidas de seguridad, de prevención para garantizarnos que lo básico alcance y .. sobre, al menos para llegar a Las Azores. Y así, aterrizamos… pienso, no en el sentido ligero cuando pensamos que alguien está en el aire y debe poner los pies en tierra… ser realista, sino verdadera y realmente… queremos tierra… coño!!!! Y por tanto hay que planificar y ser conservadores.. que lo somos. Una jornada de planificación nos repone el optimismo y seguimos….

Mi mujer me reclama… no he escrito desde hace unos cuantos días. Y es que se hace difícil. Uno comienza a comprender como y porque se mueve el mundo mediático y del entretenimiento. Los diarios solo reportan malas noticias… en su mayoría, y no es que las buenas no sean noticia, es que se hace difícil escribir sobre ellas. Muchas de nuestra buenas noticias son de emociones..muy personales, y no queremos pasar de presumidos, egoístas, ni aburrir con pensamientos “bonitos”. De embustes “bonitos” estamos hasta la coronilla en Venezuela… ¿verdad? . Ayer, como decíamos teníamos el día mas bello, y por la noche, una paz….. Atlántica. Como describirlo…no lo sé. En la guardia de la madrugada, pensaba y sentía.. que probablemente ese era el primer día de mi vida que verdaderamente quisiera que nunca terminara…. Que fuese una especie de día eterno…..ni más… ni menos, no porque no los haya tenido felices, sino quizás solo porque no había tenido tiempo para no hacer nada sino pensar en la belleza de ese día, ….. y haber deseado por casi 2 semanas uno como éste, y sentirlo tan lejos. Pero al final allí estaba. Solo que como casi todo.. se nos fue. Nos queda ese gratísimo recuerdo que difícilmente olvidaremos.

Cada quién siente a su manera, de acuerdo con sus circunstancias…. No podemos describir ni pretender percibir lo que otros piensan … y sienten, ni interpretar acciones ni actitudes. En un espacio tan pequeño… cada quien necesita su espacio, y la vida diaria se va construyendo con detalles. La generosidad es el acto que no requiere interpretación. Solo eso compensa lo que nuestro individual egoísmo exige, de vez en cuando, cuando nuestro estado de ánimo cambia. Afortunadamente la tripulación se turna, en forma arbitraria y casual para procesar sus malos momentos, que todos tenemos, como buenos humanos. Andrés padre, sin embargo, como gran responsable de esta aventura, mantiene un equilibrio de Santo. Dios se lo pague.

Hasta una nueva edición. Gracias por todos lo mensajes que hemos recibido de los amigos y familia. Uno a uno los hemos disfrutado íntegramente.

Er Ñero Aguilera
N 39º 21’ W 39º 06’